La muerte del Hno. Evaristo González Rodríguez GRAN SECRETARIO EMERITUS |
|
(Boletín Informativo, CRP, Feb-Dic 1963--Ene-Jun 1964)
Aquella mañana del 5 de Mayo de 1964 traíamos el cansancio de una madrugada en desvelo, sin saber por qué. Hora tras hora, oíamos las campanadas del viejo reloj de nuestro modesto hogar que nos iba anunciando el acercamiento del nuevo día. ¿Qué nos traería ese nuevo día?... A nuestra mente acudía la preocupación sobre aquellos hermanos que venían enfermos, unos más o menos graves y así, nos dirigimos como diariamente a la casa de todos los Odd Fellows, al moderno Edificio de 20 de Mayo y Masó. Allí, y siguiendo una disciplina con nosotros mismos, nos dirigimos a la pizarra en donde aparecen las noticias de hermanos enfermos o en desgracia y así, conocer de algún caso reciente. Allí, leímos la triste noticia. El hermano Evaristo González Rodríguez ha fallecido. Delante de la pizarra, meditamos tristemente. |
|
Aunque el fatal desenlace era esperado, nos afectó considerablemente. Y subimos a las Oficinas de la Gran Secretaría, aquella Secretaría en que por espacio de 18 años fue atendida como Gran Secretario por el hermano "Chicho", como cariñosamente le decíamos. Allí nos encontramos con su gran amigo y hermano Joaquín H. Hermida, quien fuera durante ese tiempo su eficiente auxiliar, su entrañable hermano. Se encontraba el Hno. Hermida en la triste faena de telegrafiar la noticia a los Grandes Funcionarios de la Jurisdicción y su rostro denotaba también cansancio, ya que igualmente había sido dominado por el insomnio. Despierto de madrugada, sintió el teléfono. Eran familiares allegados de "Chicho". Nuestro querido hermano había pasado de la vida a la muerte durmiendo. Madrugada del 5 de Mayo 1964. Evaristo González Rodríguez, como todas las hermanas y hermanos conocen, venía enfermo. Hermano de una robusta constitución física y de un jovial carácter, libró una batalla entre su espíritu y su materia; sufrió profundamente en los últimos años de su vida. La pérdida de una de sus hijas queridas, quebró su salud hondamente y fue minando su organismo hasta vencerlo. El Hno. "Chicho" a su paso por la vida terrenal, tanto en el campo profano como en el fraternal, conquistó profundos afectos. Su trato caballeroso y afable y su proyección siempre animosa, fueron factores determinantes en contar, como él contaba, con verdaderos amigos. Creó un santo hogar, en el que reinaba el amor y la comprensión. Por eso, lo lloran, inconsolablemente. Se inició en la Independiente Orden de Odd Fellows, el 15 de Mayo de 1940 en la Logia "Habana No. 4", permaneciendo en activo hasta su fallecimiento. Por su clara inteligencia, pronto captó las saludables enseñanzas de la Fraternidad Oddfélica, así como sus Leyes, Doctrinas y Postulados y fue por sus méritos, ascendiendo. Así, en su Logia, ocupó distintos Sitiales por elección y nombramiento, llegando a Noble Grande en donde desarrolló una gran labor en bien de la Logia y de la Orden. Su sentimiento fraternal lo hizo siempre estar atento al cumplimiento de hermanos enfermos y en desgracia y fue un gran colaborador en la realización del Panteón de la Logia, en el Cementerio de Colón, sobre el que siempre estaba preocupado de que estuviera bien atendido. Su entusiasmo por la Orden lo indujeron a iniciarse en todas las Ramas; perteneció al Campamento "Panchito Ma. Fernández No. 13", del que fue Patriarca Jefe y Representante ante el Gran Campamento Cuba. Fue miembro de la Logia de Rebekahs "Nobleza No. 35", del Cantón "Patria No. 2", y de la Logia Juvenil "Enrique José Varona No. 1". Su carácter simpático y chistoso lo impulsó a iniciarse también en la Rama de Samaritanos perteneciendo al Sactorum "Mecca 284". El hermano Evaristo González Rodríguez fue un Gran Odd Fellows, dotado de una destacada personalidad y de una exquisita proyección que sembraba amistad doquier llegara. Así, por sus excelsas cualidades y méritos adquiridos, recibió con la asistencia d» infinidad de hermanas y hermanos distintos homenajes entregándosele Diplomas de Honor, Diplomas de Mérito y obsequios conmemorativos y Joyas por su Alto Rango. En el año de 1945. en Sesión de Gran Logia verificada en Santiago de Cuba, fue ascendido mediante elección al responsable y elevado cargo de Gran Secretario de la Gran Logia de Cuba, desempeñando el mismo con el aplauso y simpatía de todos hasta Diciembre de 1963 (Sesión de Gran Logia No. 77 celebrada en La Habana), en que por razón de su delicado estado de salud renunció a tan elevado cargo. Y podemos informar que su perenne preocupación lúe en todo momento su querida Independiente Orden de Odd Fellows, a la que él diera sus años de juventud y ofreciera su acción fructífera. Tuvo a su lado, como basamento de sus éxitos, a ese meritísimo hermano, auxiliar suyo. Joaquín H. Hermida Arestuche. Entre ambos existía un profundo afecto y una gran compenetración; saludable lazo que los mantuvo unidos durante 18 años. La Gran Logia de Cuba en la memorable Sesión No. 77. siendo Gran Maestro el valioso Hno. Fernando Gómez Gómez, muy a su pesar y visto el caso de salud, aceptó la renuncia, y entre aplausos prolongados fue nombrado Gran Secretario Emeritus, así como, para satisfacción del propio hermano Evaristo González Rodríguez y por el bien de la Orden, fue aclamado para el cargo de Gran Secretario, en justo reconocimiento a la labor realizada, el Hno. Joaquín H. Hermida Ares-tuche, su gran amigo y hermano. |